Visitar Machu Picchu es uno de los sueños de todo viajero que llega a Perú. Pero lo que muchos no saben es que la aventura empieza mucho antes de pisar la ciudadela inca. El viaje en tren a Machu Picchu es parte esencial de la experiencia: un recorrido entre montañas, ríos y paisajes andinos que poco a poco se transforman en selva.
Hoy existen varias formas de llegar, pero sin dudas los trenes a Machu Picchu son la opción más cómoda, segura y escénica. Existen distintos niveles de servicio —desde los económicos hasta los de lujo— y cada uno ofrece una manera diferente de vivir el trayecto.
¿Cómo llegar a Machu Picchu en tren?
La mayoría de los viajeros parte desde Cusco o Ollantaytambo, en el Valle Sagrado de los Incas. Desde allí, el tren atraviesa el valle siguiendo el curso del río Urubamba hasta llegar a Aguas Calientes, el pueblo que funciona como antesala de Machu Picchu.
El viaje dura entre 1 hora 30 minutos y 3 horas, según el punto de partida. Durante el trayecto, el paisaje va cambiando: los picos nevados de la cordillera dan paso a un entorno selvático, húmedo y lleno de vegetación. Es uno de los recorridos ferroviarios más bellos del mundo.
Dos empresas operan esta ruta: PeruRail y Inca Rail. Ambas ofrecen varios tipos de trenes, con diferentes precios, horarios y niveles de confort.
PeruRail: la empresa pionera
PeruRail fue la primera compañía en operar trenes turísticos hacia Machu Picchu. Fundada en 1999, es hoy la más conocida y cuenta con tres servicios principales: Expedition, Vistadome y Hiram Bingham.
Expedition
Es el tren más económico de PeruRail. Ofrece un ambiente funcional, con asientos cómodos, música andina y amplias ventanas laterales. Es ideal para quienes quieren llegar de forma rápida y sin lujos, pero disfrutando del paisaje del Valle Sagrado.
- Incluye: snacks, bebidas y atención a bordo.
- Salidas: desde Cusco, Poroy o Ollantaytambo.
- Duración promedio: 1 h 45 min – 3 h.

Vistadome
Un clásico para los que buscan algo más especial. El Vistadome tiene techo panorámico, ventanales amplios y servicio de cortesía con bebidas y snacks. En el viaje de regreso, suele incluir un show de danzas típicas y desfile de prendas de alpaca, que le dan un toque cultural al recorrido.
Ideal si querés combinar confort, vistas y autenticidad.

Vistadome Observatory
Es la versión premium del Vistadome. Además del vagón panorámico, cuenta con un coche observatorio con balcones y música en vivo durante el recorrido. Brinda una experiencia más completa sin llegar al lujo extremo del Hiram Bingham.
Ideal para: quienes desean un viaje con vistas abiertas, ambiente relajado y un toque cultural adicional.
Precio: entre 120 y 140 USD.

Hiram Bingham
El tren más lujoso que viaja a Machu Picchu. Operado por Belmond, está inspirado en los trenes Pullman de los años 20 y ofrece un servicio de lujo completo: almuerzo gourmet, bar libre, música en vivo y coche observatorio.
Más que un transporte, es una experiencia cinco estrellas sobre rieles. Perfecto para celebraciones, lunas de miel o viajeros que buscan algo único.
Precio aproximado: entre 450 y 550 USD por persona.

Inca Rail: modernidad y exclusividad
Inca Rail nació en 2009 como una alternativa moderna a PeruRail. Se destaca por el diseño contemporáneo de sus trenes y la atención personalizada. Opera desde Ollantaytambo y también ofrece conexiones desde Cusco en bus + tren.
The Voyager
Es su servicio estándar. Los vagones tienen amplias ventanas, asientos ergonómicos, snacks y bebidas de cortesía. Ofrece una experiencia simple pero muy agradable, ideal para viajeros que buscan buena relación precio-calidad.
Precio promedio: 65 – 85 USD.

The 360°
Uno de los trenes panorámicos más recomendados. Sus ventanales se extienden hasta el techo y cuenta con un coche observatorio abierto para disfrutar el paisaje al máximo. Incluye servicio a bordo, snacks y bebidas elaboradas con productos locales.
Ideal para quienes quieren una experiencia inmersiva sin pagar lujo total.

The First Class y The Private
Estos servicios están pensados para el público más exigente. The First Class ofrece asientos amplios, menú gourmet, vino de autor y atención exclusiva.
The Private va un paso más allá: se trata de un vagón privado, reservado solo para tu grupo, con un chef y guía propios.
Precios: desde 400 USD en adelante.

Consejos para elegir tu tren a Machu Picchu
Elige bien el punto de partida.
Desde Cusco el viaje es más largo, pero te ahorrás traslados. Desde Ollantaytambo, en cambio, el recorrido es más corto y económico.
Compra con anticipación.
Entre junio y septiembre, los trenes se llenan rápidamente. Conviene reservar al menos un mes antes.
Ten en cuenta la hora de salida.
Los trenes de la mañana te permiten llegar antes a Machu Picchu, pero implican madrugar. Los de la tarde ofrecen mejores vistas por la luz del atardecer.
Compara el precio con el valor del servicio.
A veces pagar un poco más te cambia la experiencia: los panorámicos ofrecen vistas que valen cada dólar extra.
Verifica los horarios de regreso.
El último tren suele salir entre las 18:00 y 21:30 h, según la temporada.
Cuadro comparativo entre los trenes a Machu Picchu
| Servicio | Empresa | Nivel | Características principales | Precio aprox. (USD) |
|---|---|---|---|---|
| Tren Local | PeruRail | Básico | Solo para residentes; sin extras | 10 – 20 |
| Expedition | PeruRail | Estándar | Cómodo, música andina, refrigerios incluidos | 60 – 80 |
| Vistadome | PeruRail | Panorámico | Techos de vidrio, snack y show cultural | 90 – 110 |
| Vistadome Observatory | PeruRail | Panorámico Plus | Coche observatorio con música en vivo y vistas abiertas | 120 – 140 |
| The Voyager | Inca Rail | Estándar | Ventanas amplias, servicio amable, snacks incluidos | 65 – 85 |
| The 360° | Inca Rail | Panorámico | Coche observatorio y vistas 360° | 100 – 130 |
| Hiram Bingham | PeruRail | Lujo | Almuerzo gourmet, bar libre, música en vivo | 450 – 550 |
| The First Class / The Private | Inca Rail | Lujo / Premium | Vagón exclusivo, menú gourmet, vino y atención personalizada | 400 – 500 |
No hay una única forma de llegar a Machu Picchu, pero el tren es sin duda la más mágica. Cada servicio tiene su encanto: los básicos son funcionales, los panorámicos te regalan postales inolvidables y los de lujo transforman el viaje en una experiencia de película.
Si tenés tiempo, te recomiendo tomar el tren de día para disfrutar el paisaje y regresar con luz natural. Porque en Machu Picchu, incluso el camino vale tanto como el destino.